Tarta de chocolate y frambuesa sin horno

   ¡¡Hola cocinillas!! ¡Estamos de vuelta! Ha sido un verano muy movidito y aunque hemos cocinado alguna cosilla que otra, mucho menos de lo habitual, no hemos encontrado ocasión ni energía para sentarnos delante del ordenador y compartir las recetas. Aunque en nuestro perfil de Instagram y  Facebook hemos compartido algunas fotos e ideas, algo es algo.

  Esta no era la receta con la que queríamos arrancar el nuevo curso, nótese el término académico, el resultado nos gustó tanto y la elaboración es tan fácil,sencilla y apta para tantos públicos ya que es sin azúcares añadidos, sin gluten, sin lactosa y vegana que no hemos podido resistirnos a retrasar su publicación. Además, con estas temperaturas sigue dando bastante pereza encender el horno y esta tarta fresquita y sin horno es ideal para esta época del año. Fresquita, deliciosa y nada pesada. Los ingredientes podéis encontrarlos en cualquier supermercado y sólo se necesita un molde (a ser posible desmontable) de unos 20-22 cm de diámetro. Si fuera un poquitín más alto simplemente la tarta quedaría un poco más bajita y pequeña. Para decorar podéis usar otra fruta pero el contraste entre la frambuesa y el chocolate es simplemente delicioso. Una vez soltado el rollo, vamos al lío:

INGREDIENTES:

Para la base:

150 gr de almendra molida

20gr de cacao en polvo sin azúcares añadidos

50 gr de aceite de coco o mantequilla fundida

20 gr de sirope de ágave o miel

una pizca de sal

Para la crema:

130 gr de leche de coco

170 gr de chocolate (el que necesitéis: sin lactosa, sin azúcares añadidos, etc). Nosotros usamos chocolate negro pero podéis usar chocolate con leche.

2 cucharadas soperas de mermelada de fresa o frambuesa sin azúcares añadidos

Para decorar:

200-250 gr de frambuesas frescas

unas hojas de menta

ELABORACIÓN:

   En primer lugar engrasamos el molde con un poco de aceite de coco o mantequilla. Preparamos la base mezclando todos los ingredientes hasta formar una masa. Con ayuda de las manos y una cuchara la extendemos en la base del molde. Debemos cubrir un poco las paredes para evitar que el relleno líquido se nos salga. Reservamos en el frigorífico.

  Para preparar la crema del relleno, ponemos a calentar la leche de coco en un cazo a fuego medio. Añadimos el chocolate y removemos hasta que se funda completamente. Una vez todo mezclado apagamos el fuego e incorporamos la mermelada. Mezclamos bien. 

  Sacamos el molde del frigorífico y vertemos el relleno. Decoramos con las frambuesas frescas. Llevamos la tarta al frigorífico durante al menos 4 horas. Finalmente, podemos aportar algo de color y contraste con unas hojas de menta.