Os traigo una rápida y sencilla receta. Económica para decir adiós a la cuesta de enero y que suele gustar a todos.Además, no necesitas más de media hora para prepararla. El llamado cuscús, cous-cous, acuzcuz o incluso kuskusús es un plato tradicional de la cocina de África del norte.Normalmente se prepara para acompañar platas con cordero, pollo y verduras aunque también podéis tomarlo en platos dulces (si tenéis curiosidad podéis ver la receta que tengo en el blog de couscous, yogur y naranja) y se puede tomar caliente, templado o frío en ensaladas.
La elaboración de esta receta no tiene complejidad alguna y podéis variar un poco las cantidades de verdura y los condimentos en función de la intensidad de sabores que queráis conseguir, yo suelo ser bastante generosa en este caso con la hierbabuena y la canela. Vamos a ello:
INGREDIENTES:
2 pechugas de pollo troceadas en dados
2 cebollas medianas
dos calabacines medianos
1 bote pequeño de garbanzos cocidos
1 puñado generoso de pasas
1 puñado generoso de almendras
1 cucharadita de canela molida
1/2 cucharadita de jengibre molido
sal y pimienta
un chorro generoso de aceite de oliva (como unas 7 cucharadas soperas)
5 hojas de hierbabuena fresca picada
1 vaso de cous cous en grano
ELABORACIÓN:
Para empezar, picamos la verdura. Ponemos el aceite a calentar a fuego lento en una sartén y agregamos la cebolla. Rehogamos bien unos minutos e incorporamos los dados de calabacín.Cuando la verdura esté algo tierna, sin estar lista del todo, incorporamos el pollo y salpimentamos al gusto. Removemos bien y añadimos el resto de los ingredientes y dejamos cocinar a fuego lento hasta que todo esté tierno y bien cocinado, aproximadamente unos 15 minutos. Mientras tanto preparamos el cous cous siguiendo las instrucciones del fabricante y sin miedo: ponemos a hervir el agua indicada en un cazo, añadimos una pizca de sal y una cucharada de mantequilla cuando hierva e incorporamos el cous cous. Apartamos del fuego y removemos durante unos minutos. Poco a poco veremos que la sémola de trigo va absorbiendo todo el líquido. Volvemos a poner el cazo en fuego y removemos un par de minutos más. Apartamos y removemos bien con un tenedor para evitar que se formen bolas. Comprobamos que la verdura y el pollo están listos y montamos el plato.
¡Espero que os guste!
