¡Hola cocinillas! En esta ocasión os traemos una receta de las más típicas del mundo anglosajón. Hace tiempo la preparamos sin arándanos y usando buttermilk (que no cunda el pánico), la podéis encontrar aquí: Banana bread con buttermilk. Para mucho es, como dice su nombre, una receta de pan dulce. A mi me parece más una receta de bizcocho con una miga densa y húmeda. Necesita poco endulzante gracias al dulzor natural del plátano y es ideal para tomar en la merienda, a media mañana e incluso en el desayuno si te apetece algo dulce. Aunque el plátano no esté en la lista de vuestra fruta favorita veréis que no tiene un intenso sabor a plátano. No es esencial usar arándanos para preparar esta receta pero sí que aportan un contraste de sabor delicioso. En este enlace podéis ver la receta que hemos utilizado de inspiración donde podéis ver unas fotos muy bonitas: Delicious Martha, Banana bread Los ingredientes y la elaboración son de lo más corriente. Esta receta suele prepararse en un molde de plum cake, el alargado. El que usé es bastante grande, cuidado. Vamos al lío:
INGREDIENTES:
125 gr de mantequilla a temperatura ambiente
100 gr de azúcar ó 40 gr de tagatosa en polvo
2 huevos
250 gr harina de trigo
1 cucharadita de levadura
1 cucharadita de bicarbonato sódico
75gr de miel ó 50 gr de sirope de arce o ágave
1 cucharadita de canela en polvo
100 gr de arándanos (opcional)
1 plátano para decorar
4 plátanos triturados
ELABORACIÓN:
Preparamos el puré de plátano. Los pelamos, los ponemos unos 30 segundos en el microondas y los trituramos con un robot de cocina o con la ayuda de un tenedor y paciencia. Reservamos. Batimos la mantequilla junto al azúcar o tagatosa. Incorporamos el puré de plátano y mezclamos. A continuación, añadimos los huevos uno a uno y vamos mezclando bien. En otro bol mezclamos los ingredientes secos (el bicarbonato, la canela molida, la levadura y la harina) y vamos incorporando estos ingredientes junto al bol de los ingredientes húmedos. Poco a poco. Cuando esté todo bien homogéneo añadimos la miel o el sirope y finalmente los arándanos (previamente enjuagados y bien secados con un paño de cocina o servilleta).
Ponemos el horno a precalentar: calor arriba y abajo, ventilador y 170º. Engrasamos el molde con mantequilla y harina o ponemos papel de hornear. Vertemos la masa. Ponemos en la superficie el plátano cortado por la mitad y podemos espolvorear con un poco de azúcar o tagatosa.
Horneamos durante 50 minutos aproximadamente o hasta que veamos que la superficie está dorada y al pincharlo no mancha. Retiramos del horno y dejamos templar unos 15 minutos. Desmoldamos y dejamos enfríar totalmente sobre una rejilla.
Para servir es recomendable cortarlo en rodajas gruesas. Se puede acompañar de yogur, miel, sirope, helado, etc o simplemente tal cual.
No hay comentarios:
Publicar un comentario