Tarta de mascarpone y fresas

¡Deluxe señor@s!Matrimonio ideal: la fresa y el mascarpone. Sí, otra tarta de queso más (las adoro) y de esas rapiditas de hacer pero con mascarpone en lugar de queso cremoso. Ya sabéis que el mascarpone da un toque diferente a las tartas de queso y que el sabor de estas tartas varía en función del tipo de queso que usemos y de los ingredientes de la base. Sin horno, casi para variar, porque son más rápidas de hacer y quizás más ligeras de tomar. Además, se agradece en esta época del año. Vamos al lío:

INGREDIENTES:

*Para la base:

60 gr copos de avena

40 gr almendra picada (podéis usar 100 gr de galletas en lugar de la avena y la almendra)

4 cucharadas soperas de mermelada de fresa

50 gr de mantequilla

(También podéis usar la base vegana que ya usamos en nuestra tarta de queso crema: http://love-cookingbits.blogspot.com.es/2014/10/tarta-de-queso-con-base-vegana-y-crema.html )

*Para la crema:

250 gr queso mascarpone

200 gr fresas trituradas

4 hojas de gelatina

1 yogur natural o griego (también podéis usar 200 ml nata montada)

100 gr azúcar o edulcorante líquido ( unas 5 cucharadas soperas. Ya sabéis que el dulzor se rectifica al gusto)

*Para decorar:

Un puñado de fresas

Frutos secos picados

ELABORACIÓN:

Primero nos ponemos con al base. Fundimos la mantequilla unos 15 segundos en el microondas y la mezclamos con el resto de los ingredientes. Si habéis optado por las galletas hay que triturarlas antes. Mezclamos bien y la extendemos presionando los dedos en la base del molde. Yo usé un molde desmontable redondo de unos 20 cm de diámetro (uno más pequeño de lo habitual). Forré la base con papel film para que no se arañe al cortar la tarta. Reservamos en el frigorífico.

Mientras tanto ponemos las hojas de gelatina a hidratar en un vaso/bol con agua. Calentamos a fuego lento las fresas trituradas (se enjuagan y se trituran con un robot de cocina, batidora o thermomix) y en un bol mezclamos el queso con el yogur o la nata montada y el azúcar o edulcorante. Batimos bien. Cuando el puré de fresa esté bien caliente, sin hervir, y las hojas de gelatina bien hidratadas (muuuy blanditas) incorporamos las hojas al puré y removemos bien hasta que se disuelva completamente. Apartamos del fuego y dejamos enfríar unos 5-10 minutos. Seguidamente incorporamos el puré a la crema de queso. Mezclamos bien con movimientos envolventes. Sacamos nuestro molde del frigorífico y extendemos la crema por encima de la base. Dejamos enfríar unos 5-10 minutos y de nuevo al frigorífico durante al menos 3-4 horas. Como siempre, mejor de un día para otro. Decoramos al gusto, yo usé unas fresas y un puñado de frutos secos picados. ¡Y listo!